Cuando nos levantamos en la mañana lo primero que acaricia nuestra cara es la luz para avisarnos que un nuevo día empieza. Estamos tan lejos de tantas cosas que ocurren en este mundo, sean alegres o tristes, y más bien lo que escuchamos diariamente en los noticieros nos hace cerrar nuestro corazón para no ver que es lo que pasa y alejarnos del sufrimiento, de la maldad y de la constante pelea por el poder que enceguece a muchos y perpetúa a otros para sentirse dueños de la verdad. Ante todo ello hoy al despertar y ver esta imagen en internet me dio felicidad y la he guardado el el banco de mis tesoros. La inocencia de este animalito que siendo tan grande quiere entablar amistad con otros seres tan lejos de su especie. Lo que me invita a pensar «cuánto estamos perdiendo los seres humanos al alejarnos cada vez más de nuestros congéneres» Sea pues esta imagen motivo para reflexionar e invitarnos a extender nuestra mano a quien es más débil y pequeño, así unidos podremos hacer la gran diferencia para convivir en armonía.
Hace unos días escuché que darán un premio de 100, 000 dólares al que invente algo que ayude a la humanidad para seguir avanzando. Y pienso que antes de ello debemos concientizarnos que sólo lo lograremos unidos por un ideal común, la convivencia hermanada por los sentimientos solidarios, donde nadie se sienta solo, levantándonos unos a otros en conjunción con la naturaleza. Porque hemos sido creados para compartir y no para dividir.
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